Aplicaciones del Ozono
El OZONO, segundo elemento con mayor potencial de oxidación que es fácilmente obtenible, es un excelente agente esterilizante. En la actualidad numerosos países, tanto europeos como del resto del mundo emplean el OZONO para mantener libres de bacterias, mohos y olores, las bodegas, y refrigeradores de alimentos para la preservación de quesos, huevos, carnes, pescados, pollos, frutas, etc.
Actividad bactericida
El OZONO es un bactericida muy efectivo tanto en el aire como en el agua; por consiguiente debe estar presente en concentraciones relativamente altas para ser efectivo en las cámaras donde se requieren radiaciones Tipo C.
Condiciones de almacenamiento para las frutas
El OZONO actúa solamente en la superficie de la mayoría de las frutas. El OZONO debe estar en unas concentraciones lo suficientemente altas para permitir su descomposición sobre las paredes del cuarto frigorífico, sobre las cajas de madera, y cualquier otro objeto presente, para todavía mantenerse en una concentración suficiente con el fin de proporcionar su efecto bactericida y fungicida.
El OZONO en el control de los olores
El tratamiento con OZONO, controla los olores en los cuartos de almacenamiento cuando se aplica entre cambios de frutas al ser almacenadas. Las temperaturas bajas ralentizan la velocidad en la cual se controla el olor, pero la humedad relativa no tiene ningún efecto. Niveles de 0,01 a 0,04 cm3 de OZONO por m3 de aire elimina los olores.
Las cajas para almacenar frutas suelen desarrollar olores con humedades relativas del 80 a 90 % en los cuartos frigoríficos, estos olores pueden controlarse de una forma efectiva con el tratamiento del OZONOA.
Actividad fungicida
Pequeñas concentraciones de OZONO, son necesarias para obtener superficies libres de hongos. Sin embargo, concentraciones más altas, son necesarias para destruir las colonias ya existentes.
La actividad fungicida del OZONO aumenta con el incremento de la humedad relativa, dado que el OZONO no penetra profundamente dentro de la fruta.
Su acción más importante radica en la superficie de la misma
Estos hechos indican que los microorganismos transmitidos por el aire deben ser absorbidos por la humedad a fin de que el OZONO sea más efectivo.