Ganadería y avicultura

Aplicaciones del Ozono

Efectos a considerar

- Desarrollo de gérmenes y bacterias.

- Aire poco oxigenado.

- Emanaciones de gases amoniacales.

- Entrada de cuerpos extraños (agentes contaminantes) del exterior.

- Malos olores.

Consecuencias

- Animales no saludables.

- Crecimiento retardado.

- Falta de apetito.

- Menor producción de carne.

- Menor producción de leche.

- Epidemias y contagios.

- Diarreas.

- Brucelosis.

- Bacilo de koch, etc.

Todos estos problemas se pueden reducir o eliminar realizando una ozonización adecuada tanto en el aire como en el agua.

Está mundialmente reconocida la aplicación del OZONO en la industria ganadera y avícola. Estando fuera de toda duda el hecho de que el OZONO a bajas concentraciones tiene una notable acción BACTERICIDA, FUNGICIDA, Y VIRULICIDA EN GENERAL; destruyendo con gran rapidez estreptococos, estafilococos, colibacilos así como las más enérgicas toxinas difterianas y tetánicas.

El Ozono, en su eminente acción bactericida, destruye cualquier bacteria, virus, o gérmenes procedentes; bien del exterior o bien del propio ambiente, en donde encuentre el medio más adecuado para su desarrollo por la existencia de emanaciones de las deyecciones . una vez que han sido eliminados los elementos contaminantes de principio permanece una sobre carga de Ozono en el aire previniendo cualquier posterior contaminación (acción bacteriostática).

En un segundo plano aparece la acción desodorizante. Es ya sabido que, las circunstancias en que se desarrolla la cría industrial de ganado obliga a concentrar grandes cantidades de animales en sitios relativamente reducidos. Las emanaciones que proceden por una parte de los propios animales, y por otra de los detritus, y las reacciones químicas que tienen lugar en la 'cama' (gases amoniacados, ácido sulhífrico, anhídrido carbónico, etc.), hacen que el ambiente sea viciado, y perfectamente apto para los propios animales debido a los olores que se originan.

El Ozono, al destruir por oxidación todas estas sustancias de tipo orgánico, hace desaparecer estos olores convirtiendo el aire enrarecido y perfectamente sano, donde los animales realizan digestiones más completas, con una mayor asimilación de los alimentos, obteniendo un considerable aumento en el proceso de transformación de pienso en carne, con su consiguiente rentabilidad.

El uso del ozono de manera continuada evita la aparición de epidemias virales y paralización de la planta con el fin de llevar a cabo desinfecciones periódicas y molestas. Además, debido a su versatilidad, es posible aumentar y dosificar la concentración de ozono según vayan creciendo los animales o cuando aumentan las deposiciones, como consecuencia las emanaciones de gases amoniacales y ***** consabidos peligros epidémicos, estacionales, etc.
Los aumentos de peso de estar ozonizada la instalación a no estarla, varían en un 15 %, y además lógicamente, el índice de transformación (Kg de alimento por kg. de carne) disminuye. Lo mismo podemos decir de las bajas: en una sola epidemia que evite el propietario amortiza totalmente el valor de la instalación, cualquiera que sea éste.
En el caso de vacas lecheras se han obtenido resultados sorprendentes y un aumento de producción de leche de 4 a 5 litros diarios más por cabeza.